INGUANZO ALONSO, VIRGILIO
Llanes (Asturias), 1913.
A partir de 1931 fue miembro del Partido Socialista y cuando comenzó la guerra se incorporó como voluntario y obtuvo el grado de temente.
Al terminar de la guerra en Asturias, salió en barco para Gijón
herido, hacia Francia, y casi inmediatamente regresó a España por Cataluña. Fue recluido en el hospital general y luego incorporado al
cuerpo de Carabineros. Estuvo en Teruel y en el Ebro, con las brigadas
internacionales, a donde lo habían trasladado como capitán. Otra
vez en Francia en 1939, fue recluido en los campos de Saint Cyprien,
Argèles sur Mer y Gurs. Cuando comenzó la guerra con Alemania fue
enviado al arsenal de Tarbes, luego a la línea Maginot, al cuerpo de
Ingenieros.
Cuando los alemanes ocuparon Francia, fue hecho prisionero
en Tarbes, para ser llevado a Alemania, y en el viaje se fugó a
París, pero allí le capturaron de nuevo. Se escapó de la isla de Guernesey
y llegó a Saint Malo, donde se incorporó al "maquis" hasta el fin
de la ocupación alemana. Cuando terminó la guerra en Europa, les
quisieron enviar a Indochina y, como no aceptaron, les desmovilizaron.
Vino a Venezuela en el mismo 1945. Al poco de llegado montó
en sociedad un garage de una bomba de gasolina , y luego otro en El
Silencio. A los tres añios los vendió y abrió una empresa de construcción,
Oinaca, que realizó trabajos particulares principalmente, aunque
también hizo obras públicas, como un colegio en Río Caribe, Edo. Sucre,
las carreteras de Los Picachos, en Cumaná y la de Las Trincheras,
Edo. Carabobo, porque la empresa de construcción creció, y pudo formar
la de pavimentación, Tuinca.
A fines de la dictadura se asoció en una hacienda en Barlovento, pero, con la llegada de la democracia, el sindicato expropió la finca y perdió su inversión. Volvió a la construcción y logró un contrato para hacer una represa en Guárico, con la maquinaria prestada, y rehizo las companías de construcción y pavimentación.
Entonces, logrando subcontratos, hizo la Av. V1ctona, parte de la Rómulo Gallegos, la entrada de La Casona, remodeló el barrio Las Tunitas de Catia la Mar y la Plaza Venezuela, en una oportunidad, y muchas obras más, hasta 1979, cuando ya no logró más contratos . Entonces llevó la maquinaria al campo, a hacer deforestaciones para el IAN, pero a finales del mismo 1979, vendió las máquinas, compró unas sabanas en Barloas y fondó una finca en donde lo fundamental era la cría de ganado. Hoy la tiene en venta, aunque la sigue administrando.
Adquirió la nacionalidad venezolana pero tuvo que renunciar a ella para poder obtener la pensión española de carabinero. Es militante de AD y del PSOE.
"Esta información ha sido sacada del libro : Victor Sanz, El exilio español en Venezuela, Vol. II. Ediciones de la Casa de España y del edito José Agustin Catalá. El centenario, Caracas, Venezuela, 1995".
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